Una de las maneras más poderosas de ayudarle a conectar su fe con el Señor es a través de un punto de contacto.

¿Qué es un punto de contacto?

Un punto de contacto es algo que se hace. Es una acción que tomas, en la fe, como un momento deliberado y tangible cuando puedes decir que liberaste tu fe a Dios para lo que necesitas. Es como girar la llave para arrancar el coche. Cuando lo haces, esperas que algo suceda. Te ayuda a enfocar tu fe en Dios y dejar ir cualquier duda.

Todo el mundo tiene fe. La Biblia dice en Romanos 12:3, Dios ha dado a cada uno una medida de fe. Cada uno de nosotros tenemos la medida de fe que Dios nos ha dado. No tiene que ser grande… o grande… o poderoso. Tienes toda la fe que vas a necesitar. No es cuánta fe tienes, sino lo que haces con tu fe lo que puede hacer la diferencia.

Ves, tu fe tiene que ser liberada antes de que pueda producir algún resultado… tiene que salir de ti e ir hacia Dios como un acto de tu creencia.

Un punto de contacto puede ser muchas cosas diferentes: una oración, la unción con aceite, un paño de oración, la Santa Comunión, una carta llena de fe…. es simplemente un método que podemos usar para alcanzar a Dios.

Algunos ejemplos de un punto de contacto usado en la Biblia son: Pedro-“Sacaban a los enfermos a la calle y los ponían en camas y sofás, para que al menos la sombra de Pedro que pasaba cayera sobre algunos de ellos” (Hechos 5:15).
Pablo-“Y Dios hizo milagros inusuales por las manos de Pablo, de tal manera que hasta pañuelos o delantales fueron llevados de su cuerpo a los enfermos, y las enfermedades los abandonaron y los espíritus malignos salieron de ellos” (Hechos 19:12).
Jesús-“Ellos… trajeron a Él a todos los que estaban enfermos, y le rogaron que si sólo tocaran el borde de Su manto. Y todos los que lo tocaron fueron sanos” (Mateo 14:35˗36).

El punto de contacto es una verdad tan simple que a menudo ha sido malinterpretada. Sin embargo, su uso es simplemente simbólico del toque sanador de Jesús. El poder de curar no está en el punto de contacto. Es Jesús quien es el Sanador.

Si desea un paño de oración o un frasco de aceite de unción, haga clic en la imagen de abajo.